Herta Müller: «El Premio Nobel me sirvió para denunciar las dictaduras»
La señora Müller es muy pequeña y de una delgadez extrema. Casi parece un pajarito. Es lo que pensaría cualquiera que se cruzara con ella por la calle. Además, viste de negro integral: del pelo a los pies. Sí, lo de pajarito le viene como anillo al dedo. Incluso el fotógrafo que la retrata para la entrevista incide visualmente en esta escueta silueta. La recorta sobre los collages que expone en el Instituto Goethe de Madrid . Herta Müller es una mujer de frente, no tiene perfiles. Le comento que el fotógrafo, Matías Nieto König , es alemán, y que puede hablar con él sin necesidad de intérpretes. Ella contesta que no sabe «si eso -que sea alemán- es bueno o malo». Se trata de una broma, pero con lo que no bromea es con la prohibición absoluta de utilizar focos para la sesión fotográfica. Los fogonazos le traen a la memoría los interrogatorios en las dependencias de la Securitate de Ceaucescu . Este detalle pone los pelos de punta, como cualquier otra secuencia de s